Esto es el día de la marmota
Todas las tardes son iguales. Todas, tal como veo al mismo caballero cada una de ellas revolviendo la basura del edificio de al lado, a la misma hora y en la misma posición...
Yo estoy todo el día, como una foto, sentada en mi computador intentando trabajar, y no pudiendo. Ya a las 17:00 mi cara es sombría y sin esperanza, y mi concentración se va al carajo... Abro y cierro navegadores, prendo un cigarrillo tras otro, voy a la cocina a buscar algún líquido, que rápidamente me tomo y vuelvo a ir, me pierdo, me pierdo y me vuelvo a perder. Y pienso en cuánto faltará para que llegue el fin del día y ya haya terminado con los rituales propios de esta casa que, ya a los 25 años, me trastornan y me irritan desde que me levanto hasta que me acuesto. Y me queda un rato aún de rituales.
Preferiría otros rituales como pagar las cuentas, ir al supermercado, cocinar y hacer aseo con mi pareja, por ejemplo a la inercia de no poder hacer las cosas como a mi me gustan. Ya no quiero comer en la mesa tratando de encontrar un tema entretenido que no refleje lo latero y deprimente que mi día estando todos los días en la casa desde hace más de un año. Ya no quiero tener que pensar en que mi vida va a empezar en una semana más y no tengo nada de qué afirmarme. Definitivamente no quiero pensar en ahorrar, lo cual resulta irrisorio, considerando que aún titulada, es bastante probable que gane $200.000 líquidos, lo cual es "sólo un poquito más" que el sueldo mínimo.
Ayer me di cuenta de que la evaluación de mi informe de práctica decía "parece que tuvo muy buena experiencia en el mundo real del diseño"... si supieran.
Yo estoy todo el día, como una foto, sentada en mi computador intentando trabajar, y no pudiendo. Ya a las 17:00 mi cara es sombría y sin esperanza, y mi concentración se va al carajo... Abro y cierro navegadores, prendo un cigarrillo tras otro, voy a la cocina a buscar algún líquido, que rápidamente me tomo y vuelvo a ir, me pierdo, me pierdo y me vuelvo a perder. Y pienso en cuánto faltará para que llegue el fin del día y ya haya terminado con los rituales propios de esta casa que, ya a los 25 años, me trastornan y me irritan desde que me levanto hasta que me acuesto. Y me queda un rato aún de rituales.
Preferiría otros rituales como pagar las cuentas, ir al supermercado, cocinar y hacer aseo con mi pareja, por ejemplo a la inercia de no poder hacer las cosas como a mi me gustan. Ya no quiero comer en la mesa tratando de encontrar un tema entretenido que no refleje lo latero y deprimente que mi día estando todos los días en la casa desde hace más de un año. Ya no quiero tener que pensar en que mi vida va a empezar en una semana más y no tengo nada de qué afirmarme. Definitivamente no quiero pensar en ahorrar, lo cual resulta irrisorio, considerando que aún titulada, es bastante probable que gane $200.000 líquidos, lo cual es "sólo un poquito más" que el sueldo mínimo.
Ayer me di cuenta de que la evaluación de mi informe de práctica decía "parece que tuvo muy buena experiencia en el mundo real del diseño"... si supieran.